MÁRTIRES MARISTAS
Se cumple un nuevo aniversario en el que recordamos a los Mártires de Bugobe (República Democrática del Congo)
El 31 de octubre de 1996 los hermanos Servando Mayor, Miguel Ángel Isla, Fernando la Fuente y Julio Rodríguez eran asesinados en el campo de refugiados de Bugobe, en el Congo. Llevaban trabajando desde 1995 en el inmenso campo de Nyamirangwe, asegurando la educación a los niños, ayudando en la liturgia, proporcionando multitud de servicios con el coche y con el molino. Sus escritos y sus cartas hablan con insistencia de su auténtico amor y de su apego visceral a los refugiados que se habían convertido en su auténtica ?familia?.
Entregaron sus vidas al Señor al escuchar su llamada y le siguieron en ese calvario del campo de refugiados en el que tantas personas agonizaban: los refugiados, su nueva familia, más amada que la familia que habían dejado en España. Como el Señor amaron hasta el final. En ellos brilla ciertamente una cosa: el amor. ?Nadie tiene mayor amor que el que da su vida por sus amigos?, Juan 15:13. Y con el Señor podían decir : ?Nadie me quita la vida; yo la doy voluntariamente? Juan 10:18.
¿Quiénes eran esos cuatro hermanos?
Los cuatro eran españoles, pero con una historia humana bien concreta. Y los cuatro dejaron una misión para acudir a otra misión más difícil. Servando vivía su primera experiencia misionera. Era el superior de la comunidad de Bugobe. Procedía de la Provincia de Bética donde era consejero provincial y miembro del equipo de animación pastoral. Tenía 44 años en el momento de la tragedia. Miguel Ángel había vivido 13 años en Argentina y 22 años en Costa de Marfil donde había sido superior del Distrito. Contaba 53 años.
Julio había trabajado 14 años en el Congo y se había unido a la comunidad de Bugobe en mayo de 1996. Era el más joven del grupo y acababa de celebrar los 40 años cuando fue asesinado. Fernando había vivido la mayor parte de su vida en Chile donde era formador, consejero provincial, pintor y poeta. Sólo llevaba un año entre los refugiados. Era el de más edad del grupo aunque no había cumplido todavía los 53 años.
Hoy, 27 año después, siguen siendo modelo de misión y entrega evangélica.